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lunes, 27 de marzo de 2017

A MI ME DA IGUAL

       ¡Que follón! ¿Como se puede armar tanto jaleo por cosas tan insignificantes? Es que no consigo entender a la gente que hace una montaña de algo tan nimio. Me explico, porque tal vez no sepáis por donde voy. El caso es que hay gente que por cosas... iba a decir absurdas, pero esa no es la palabra apropiada, más bien le iría .... no, esta tampoco. Bueno, no sé como llamarlas, porque ponga lo que ponga, seguro que alguien se siente ofendido. Continuo. Hay gente que se mosquea por ejemplo por cosas como la bandera, el idioma, el país... que no es que sean cosas sin importancia, sino que se les da un valor por encima del que merecen. Ojo, no me malinterpretéis, quiero decir que, aún teniéndolo, es desproporcionada la importancia que se les da, incluso se las pone por delante de valores tales como la paz, la concordia o la educación.
       Seguro que hay gente que está leyendo esto y ya esta "encendido", y eso que no he dicho nada malo sobre ello, pero como suele pasar con estos temas, está yendo por delante de mis palabras y ya me está catalogando de "esto o aquello". Yo no soy nada, ni nadie, simplemente expreso una opinión y esta es que, para mi, esos temas me dan igual. No malgastaría un gramo de esfuerzo por defender nada de eso. Me da igual que bandera le pongan a mi país, mi región, mi provincia, mi ciudad o mi... escalera. ¿No os habéis parado a pensar que tenemos una bandera para cada cosa? Nos quieren hacer ver que es una seña de identidad, que nos une y nos hace mas fuertes, cuando yo pienso que lo único que provoca son disturbios, agresiones, separación entre hermanos y enfrentamientos verbales innecesarios.
         Y lo mismo ocurre con la lengua y el país. Luchar por ello solo sirve para separarnos. ¿Quien no ha discutido alguna vez con su hermano, su cuñado o con un amigo por alguno de estos temas? Yo si lo he hecho y me he dado cuenta de lo absurdo que ha sido. Lo importante no es diferenciarnos de los demás, sino parecernos. Hablar idiomas que los demás no hablan, no vale para nada, solo sirve como algo cultural. Lo importante es poder entendernos entre nosotros, da igual que sea en español, en inglés o en vasco. Si los demás me entienden... habré acertado con la elección, pero si nadie me entiende ¿Para que me habrá servido saberlo hablar? (A parte de como algo cultural como ya he dicho) O el país ¿Donde está el límite para decir si soy español, catalán, europeo... o extraterrestre? ¿Donde están las fronteras? No existen, las hemos creado nosotros mismos. ¿Porquè un nigeriano no puede ser español? ¿O un catalán, gallego? ¿Porqué separamos a la gente por el lugar donde ha nacido? Y ¿hasta donde llega esa separación? Tal vez un catalán no quiera ser español, pero también puede ser que un tarraconense no quiera ser catalán, o un ciudadano de Reus no quiera ser tarraconense, o que un habitante de la calle San Pascual no quiera ser de Reus, o que un edificio de dicha calle no quiera pertenecer a esa calle. ¿Hasta donde estamos dispuestos a dividir? ¿No será mejor no calentarnos con esas... ¡¡cosas!! y preocuparnos por cosas que nos hagan mejorar como personas? Espero que haya mas gente que piense como yo, porque a mi, todo eso... me da igual. ¿Mentira o Verdad?

lunes, 20 de marzo de 2017

CARTA A LOS MARHUENDAS DE ESPAÑA

         Primero que nada voy a explicaros que significa eso de "Marhuendas", puesto que no se refiere a nadie en concreto, pero si que engloba a una serie de personajillos que habitan este país y que tienen una peculiar forma de ver las cosas que suceden a su alrededor. Los llamo así como podía haberlos llamado "Macedonios", "Morlacos" o "Cuentachistes". No es por nada en particular y lo es por todo. Bueno, que me enrollo, empiezo con la definición. Los "Marhuendas" son personas de carne y hueso que viven en los mundos de Yupi, es decir, viven entre nosotros pero tienen una percepción de la realidad un tanto distorsionada. Vayamos con varios ejemplos ilustrativos:
       A las familias que no disponen de trabajo ni dinero para pagarse la comida, ellos los ven como unos aprovechados que trabajan en la economía sumergida, donde se sacan una buena pasta que les permite vivir por encima de sus posibilidades. 
         Cuando en un país lejano (o quizás no tanto), se produce una guerra que acarrea la emigración de millones de personas que huyen de la misma por miedo a morir o porque se han quedado sin nada y llaman a su puerta para que les ayuden y les den cobijo, ellos creen que son hordas de desaprensivos que vienen a sus casas a robarles y, si tienen la oportunidad, a colocarles una bomba en cualquier supermercado abarrotado de gente para matarlos sin piedad, porque son malos por naturaleza y tienen pensamientos e ideas muy diferentes a las suyas.
       A la gente que pide un trabajo digno, un sueldo decente, tener las necesidades básicas cubiertas (sanidad y educación entre ellas), disponer de un hogar donde poder vivir y que no les falte algo tan necesario como la luz y el agua corriente... Vamos, lo mínimo que pediría cualquier persona normal que viviera en un país medianamente desarrollado como pueda ser el nuestro. A esas personas las ven como diablos, las consideran populistas y demagogas, que solo buscan desmoronar el sistema del bienestar que tanto sudor les ha costado construir.
        En fin, lo que les quiero pedir a los "Marhuendas" es que, por favor, bajen un día de su nube, que pinchen por unos instantes su "burbuja" de realidad virtual y que se unan a este mundo donde vivimos, para que se den cuenta de que, ni todo es tan maravilloso e idilico como veían, ni tan happy como se imaginaban. Pero que entre todos, arrimando el hombro, codo con codo, los seres humanos unidos seríamos capaces de conseguir que este mundo fuera realmente un verdadero Mundo de Yupi. ¿Mentira o Verdad?

lunes, 6 de marzo de 2017

COMO ACERTAR CON TU CURRICULUM

       Por fin he descubierto la manera ideal de rellenar un curriculum para que llame la atención de las empresas y que no duden en llamarte. La idea es simple: "Mentir en todo". Y cuando digo en todo, me refiero "en todo". Mirad, yo llevo mas de 4 años parado y no he recibido ni una sola llamada de ninguna empresa para ser entrevistado, y eso que envío todos los días 3 o 4 curriculum a diferentes empresas, que al final del año son lo menos 1.000 curriculum. Pues ni por esas. Así que he decidido cambiar por completo todo lo que en él pongo y mentir, pero mentir a lo gordo, sin escatimar, y mira por donde ya he recibido mi primera llamada a una entrevista de trabajo, no han tardado ni 2 horas en enviarme un correo para que acuda a la cita. Me voy para allá pitando a ver si hay suerte.
     ¡Guaauuu! las oficinas son todo un lujazo. Aquí hay pasta gansa, fijo. Voy para adentro a ver que pasa. Todo lo que hay en la sala de espera son chicas, no mayores de 30 años. Vamos bien. Sale una señorita de una sala contigua y me llama: "A ver, por favor, ¿Mª Jose Atienza?" A lo que contesto: "Soy yo". Ni que decir tiene que toda la sala se giró hacia donde yo estaba y me miraron con cara estupefacta. "¿Es usted, seguro?". "Si, si, sin ninguna duda". "Pues pase caballe... perdón, señorita". Entré en la sala, donde habían sentados 3 hombres bien trajeados y empezó la entrevista.

ENTREVISTADOR: ¿Mª José Atienza? Me puede explicar esto
YO MISMO: ¡Cómo no! Mi nombre es Antonio, pero resulta que en la imprenta sufrieron un error y pusieron la foto de una chica en vez de la mía, a la vez que se equivocaron de nombre. ¡Nada, un cúmulo de errores boligráficos!
ENTREVISTADOR: Error tipográfico querrá decir usted.
YO MISMO: Como ustedes quieran llamarlo, pero estaba escrito a boli cuando yo lo entregué en la imprenta.
ENTREVISTADOR: Pues vaya error. Y además aquí pone que tiene 28 años, y por lo que veo usted los 40 ya no los cumple.
YO MISMO: Bueno, es que en eso de la edad... ¿Quién no se ha quitado años alguna vez en su vida?
ENTREVISTADOR: Si, pero dos o tres, no la mitad. Me parece un poco extraño todo esto. Bueno, sigamos, aquí pone que estudió en la Universidad de Chicago, donde se licenció en económicas y realizó tres Masters, uno de ellos en Londres.
YO MISMO: Bueno, licenciado... licenciado... ¡pues no! pero he trabajado más de 20 años en puestos similares y se puede decir que tengo mucha carrera hecha.
ENTREVISTADOR: ¿No tiene licenciatura? A ver, empecemos por el principio, ¿Algo de lo que pone aquí es cierto?
YO MISMO: Si, lo del Master de Londres.
ENTREVISTADOR: ¿Y como ha hecho un Master sin tener carrera?
YO MISMO: No, es que estuve como público en un programa de Master Chef que se realizó en Londres y creí que eso podría ser interesante a la hora de conseguir empleo.
ENTREVISTADOR: La verdad es que es usted increíble y que tiene una cara impresionante, pero siento decirle que no da el perfil para el empleo que deseamos cubrir, así que no vamos a hacerle perder mas tiempo. Puede irse a su casa Mª Jo.... Perdón, Antonio.
          Y ahí acabaron todas mis esperanzas de ser de nuevo útil a esta sociedad. Pero no desespero, creo que puliendo un poco el método puedo colocarme en algún puesto de categoría, tal vez cambiando el discurso, diciendo que soy transexual o algo así. Le daré un par de vueltas y volveré a intentarlo. ¡Será por paciencia!. ¿Mentira o Verdad?